SocialisaMe.
Cómo no recordar la campaña de intriga con la que se lanzó la marca Movistar al mercado? Fue la campaña publicitaria mas costosa que se había hecho en el país hasta entonces. Y no era para menos, sustituir l marca Bellsouth en Venezuela y a otras tantas empresas en el resto del continente por la casi anónima Telefónica de España era una tarea para decir lo menos difícil. Una M verde invadió periódicos, revistas, vallas y televisoras. Así telefónica no solo conservo el segmento del mercado que compró con la marca Telcel Bellsouth, sino que además añadió nuevos usuarios a su lista de clientes.
Algo parecido ha venido sucediendo con la propuesta gubernamental de instaurar un régimen socialista en Venezuela. Inicialmente se pensó en la vieja tesis propuesta en los años setenta por el Movimiento al Socialismo, MAS, de un “socialismo a la venezolana” y para referirse a este se acuñó la etiqueta de “Revolución Bolivariana”. En ocho años la marca “Revolución Bolivariana” estaba agotada al punto de que se llegó a hablar de que tenemos un gobierno “Tapa Amarilla”, emulando la línea de genéricos de limpieza que se venden en los supermercados venezolanos.
Se hizo necesaria entonces una evolución del mercadeo del proceso socialista propuesto por el gobierno. Era menester relanzar la revolución para borrar la mala imagen dejada por la ineficiencia mostrada en los años del gobierno de Chávez. Una nueva imagen se hacia necesaria. Los propagandistas de la revolución encontraron varios hechos relevantes, entre ellos el que Chávez sigue siendo un fenómeno comunicacional y un líder de masas, su equipo aparece desgastado pero el sigue en pie, y ya a nadie cree en que las ideas bolivarianas sean viables en plano siglo XXI. Hacia falta una nueva propuesta. Los defensores del socialismo a nivel mundial ya habían lanzado la idea de que esa ideología debía ser repensada para el nuevo siglo y de allí surge el llamado “Socialismo del Siglo XXI” una nueva marca para ser vendida en el mercado político.
En Venezuela, al igual que con Movistar, una costosísima campaña de intriga se ha lanzado por todos los medios para vendernos la marca “Socialismo del Siglo XXI” y en lugar de la M verde aparece como icono la imagen de Hugo Chávez. Falta ver si al final cuando terminen de vendernos la marca resulte que, al igual que con Movistar, lo único que cambie sea el nombre de la empresa y sigamos teniendo una revolución bolivariana que al final nos lleve a un régimen socialista similar al de Cuba o al de la ya disuelta Unión Soviética.